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sábado, 6 de abril de 2013

Barreras que encuentran las personas con discapacidad


¿QUE SON…  LAS BARRERAS? ¿donde están?    ¿cómo las viven los familiares de la persona con discapacidad?  y  ¿como las vive la persona con discapacidad?



 
 

¿Solo hablamos de barreras arquitectónicas?, o ¿sociales?
 
 
Me gustaría compartirles como las he vivido yo desde las diferentes dimensiones. Así como citar algunos ejemplos sobre estas barreras.
 
 
Alguna vez llegó a mi material bibliográfico, relacionado con las barreras arquitectónicas que existen en las diferentes comunidades, y cómo son vividas por las diferentes discapacidades que algunas personas padecen. Utilizo a propósito el término “padecer” porque efectivamente en la mayoría de las sociedades se padecen, tanto los familiares que nos apoyan como la persona misma que es apoyada.
 




También recuerdo una ocasión en que una persona invidente, con su bastón recorría con sumo cuidado los arbustitos “bonitos” que ponen fuera de los hospitales con los cuales se delimita por donde no pasar; en ocasiones para evitar que se pise el césped y otras por ornamento, dejando libre solo pequeños espacios por donde dirigir la circulación  peatonal. Dicha persona a solo unos pasos de llegar al acceso, decidió regresar y buscar otra opción. Cabe mencionar que no vi a ninguna de las personas cercanas apoyarlo, diciéndole que estaba próximo el paso.

 



 

 
 

Igualmente puedo comentarles que los portones eléctricos de las cocheras, son activados frecuentemente desde el interior de las casas y no existe la precaución de asomarnos para ver si va pasando por la banqueta alguna persona invidente, con compromiso motor o una persona mayor.


 
 


 
Alguna vez han observado que en algunos lugares de recreación o esparcimiento como pueden ser cines, teatros, etc… no existen rampas o  elevadores. A veces las personas pueden desplazarse con apoyo de sus familiares para ingresar a la sala del teatro por ejemplo, pero los que no, deben abstenerse de este tipo de entretenimientos.

 
 
Recuerdo que en cierta ocasión, por algunos meses necesité desplazarme con silla de ruedas. La primera barrera física que me encontré fue en el mismo hospital que me atendía. Las escaleras estaban ligeramente desprendidas lo que hacía una inclinación con la cual hasta las personas con buena marcha podrían caerse. También  las pequeñas rampas tenían una inclinación inadecuada, haciendo que a las personas que apoyan para trasladar al paciente, se les complique el ascenso y la persona le pese demasiado. 


Y QUE PASA CUANDO HABLAMOS DE LAS BARRERAS SOCIALES?
 
 
Cuando se tienen que  utilizar botas de marcha, férulas, etc en ambas piernas, esto obstaculiza el poder caminar. Cuando me encontré en esa situación, en una fila las personas comentaron que no darían un lugar preferente sólo por tener una limitación, a pesar de ni siquiera haberlo pedido.


Asimismo pude darme cuenta que en las tiendas departamentales no existen asientos para esperar mientras se compra en estos almacenes, y cabe mencionar que son necesarios.

Los familiares hacen grandes esfuerzos para cargar a los hijos que ya están grandes y no cuentan con sillas de ruedas en poblaciones de bajos recursos, y el entorno no facilita esta situación.

Y qué decir de cómo lo vive la persona con discapacidad, que se da cuenta y le preocupa el esfuerzo de su acompañante y  siente molestia al ser tratado inadecuadamente.
 
 
 

Algunas veces la misma persona defiende sus derechos pero hay ocasiones en que prefiere callar ante oídos “SORDOS”, es decir, PERSONA QUE ESCUCHA PERO NO APOYA, SINO INTERFIERE.
 
 
En las mismas escuelas especiales los dirigentes insisten en que  sean instaladas  rapas o elevadores para los pisos altos, justificando la imperiosa necesidad ante esta población. Y son los encargados de las remodelaciones quienes argumentando la falta de recursos económicos y el alto costo de un elevador o las grandes rampas, hacen caso omiso de las necesidades de estas personas.
 

 
 
 
Algunas familias rompen con las barreras quitando las discapacidades de sus hijos. Para ejemplificar lo anterior, les comparto dos enlaces de Adriana Macías.

Adriana Macías sin duda, un ejemplo de vida:

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